"Flat or Not" así se llama la nueva campaña de las aerolíneas KLM cuyo objetivo es dar a conocer sus nuevos asientos en Business Class. Para ello han elegido realizar una acción con cámaras ocultas en la terminal 4 del aeropuerto de Madrid.
La "broma" consistía en colocar uno de sus nuevos asientos camuflado entre los que hay dispuestos en toda la terminal para esperar mientras se abren las puertas de embarque. A lo largo de todo el día varios pasajeros se sentaron ahí pero al ver que el respaldo empezaba a reclinarse hasta ser una cama recta de casi 2 metros muchos no aguantaron y se levantaron. Por ello, el reto consistía en encontrar aquella persona que no se asustara y se tumbara tranquilamente hasta el final y ¡lo consiguieron! La afortunada fue una mujer que, a parte de ganar a sus contrincantes, también se hizo con 2 billetes gratuitos en primera clase al destino que ella eligiera.